“La violencia es moralmente equivocada y perversa” le dice a un colmado Pepsi Center
Por David Montero
Rocky Mountain News
18 de Setiembre de 2006
La sabiduría a veces suena completamente lógica e incluso un poco sencilla, pero la que entregó el Dalai Lama a una multitud el domingo en el Pepsi Center, pareció llevar una exorbitante importancia.
Por David Montero
Rocky Mountain News
18 de Setiembre de 2006
La sabiduría a veces suena completamente lógica e incluso un poco sencilla, pero la que entregó el Dalai Lama a una multitud el domingo en el Pepsi Center, pareció llevar una exorbitante importancia.
Pero eso fue algo que el Dalai Lama trató de disipar desde los primeros momentos de su discurso.
“Mentalmente, emocionalmente, nosotros somos los mismos” él dijo. “Yo soy sólo uno de ustedes”
Pero pocos tienen su tribuna, pueden vender a 100 dólares el boleto, agotar las localidades del Pepsi Center y competir con los Denver Broncos en una tarde de domingo, especialmente cuando el equipo de la ciudad estaba jugando a unos pocos cientos de yardas.
Así el Dalai Lama se sentó en una silla negra sobre el escenario con tres grandes video monitores detrás, serpentinas bordó y doradas y un intérprete y explicó como el amor de los niños por su madre es instintivo desde el nacimiento, no un rasgo aprendido a través del tiempo.
Esto lo vinculó al tema total, que era la ciencia de hacer lo correcto, eligiendo ser afectuoso en lugar de egoísta y cruel. Esta filosofía, si se practicara por cada persona en el planeta, podría convertir lo que él llama un siglo pasado de “derramamiento de sangre y violencia” en un próximo siglo de paz.
“La violencia es moralmente equivocada y perversa”, dijo.
Muy expresivo –saludando con sus manos o golpeando sus puños contra sus palmas- el Dalai Lama también cuidó que su discurso no fuera manifiestamente político aunque tuvo muchas oportunidades para que así fuera.
Aparte de hacer un llamamiento para la prohibición de las armas nucleares –un comentario que provocó aplausos generalizados- él se refirió a su patria tibetana ocupada por China sólo cerca del final de una sesión de preguntas y respuestas en la cual él condenó a China.
China, dijo, no puede continuar manteniendo a su gente en la oscuridad. Ella necesita una prensa libre y debe permitir a la gente practicar sus propios sistemas de creencias.
“Una sociedad cerrada es casi como un suicidio” dijo.
Esta fue la última charla pública del Dalai Lama en Denver después de reunirse con nueve ganadores del Premio Nobel de la Paz este fin de semana para el PeaceJam, programa internacional de educación sin fines de lucro que tiene 10 años y que trajo a más de 3000 adolescentes de todo el mundo, para encontrarse con los laureados para trabajar en soluciones pacíficas a los conflictos que abundan.
El discurso del domingo en el Pepsi Center fue patrocinado por el Instituto Mente y Vida, co fundado por el Dalai Lama, Francisco Varela y el hombre de negocios Adam Engle en Boulder en 1987. El Instituto busca unificar la tecnología científica con las prácticas budistas para conseguir mejor salud y bienestar para la gente.
En el caso que la gente no estuviese segura sobre eso, un corto video narrado por el actor Richard Gere dio el lanzamiento, previo a que el Dalai Lama tomara el escenario.
La charla de 45 minutos del Dalai Lama comenzó cerca de 30 minutos tarde porque la seguridad era muy estrecha alrededor del Pepsi Center. Los Estados Unidos consideran al Dalai Lama Jefe de Estado de Tíbet, por lo tanto la seguridad del Servicio Secreto y del Departamento de Estado extendió largas líneas afuera del Centro.
Pero cuando este comenzó, la muchedumbre de más de 14.000 personas pareció hipnotizada.
Después de la actuación de la Asociación tibetana de bailarines de Colorado y de la interpretación de varias canciones de Nagang Kechog en su flauta, Engle presentó al Alcalde de Denver John Hickenlooper.
El Alcalde introdujo al Dalai Lama.
“Esto es realmente genial” dijo Hickenlooper antes del lanzamiento de la historia del Dalai Lama, que incluyó cómo él se convirtió en el XIV Dalai Lama al ser descubierto a la edad de 2 años por monjes budistas.
El Dalai Lama varias veces se refirió a la gente sobre cómo ser afectuoso y usar eso para conseguir la armonía con los demás. También urgió a la gente a ser egoísta en un modo sabio.
“Cuidando a más gente, tú obtienes los beneficios” dijo. “Cuidándote sólo a ti mismo, tú pierdes”.
Él también respondió varias preguntas seleccionadas de Internet, preguntas hechas por la gente sobre temas que variaban entre la paz mundial y cómo criar los niños.
Ante las dos preguntas –incluyendo la de criar un niño- él se rió cuando dijo “Yo no sé”.
El Dalai Lama le pidió a aquéllos en la multitud que no esperaran magia o su bendición, explicando que ambas no eran el por qué de que él estuviera allí. En cambio, él los urgió a que hicieran cambios positivos dentro de ellos mismos.
Al menos uno de aquéllos que escuchó su charla tomó su consejo de corazón.
Ryan Foo, 14, de Westminster, se sentó afuera del Pepsi Center y dijo que él creía que los objetivos del líder espiritual de un mundo más pacífico son alcanzables y que él quiere ir a trabajar por ellos enseguida.
Foo dijo que el éxito es posible, pero no probable en su vida, sin embargo.
“Yo estoy dispuesto a trabajar por esto así aquellos después de mí pueden tenerlo” dijo “Yo creo que es lo que el Dalai Lama está haciendo ahora”.-
“Mentalmente, emocionalmente, nosotros somos los mismos” él dijo. “Yo soy sólo uno de ustedes”
Pero pocos tienen su tribuna, pueden vender a 100 dólares el boleto, agotar las localidades del Pepsi Center y competir con los Denver Broncos en una tarde de domingo, especialmente cuando el equipo de la ciudad estaba jugando a unos pocos cientos de yardas.
Así el Dalai Lama se sentó en una silla negra sobre el escenario con tres grandes video monitores detrás, serpentinas bordó y doradas y un intérprete y explicó como el amor de los niños por su madre es instintivo desde el nacimiento, no un rasgo aprendido a través del tiempo.
Esto lo vinculó al tema total, que era la ciencia de hacer lo correcto, eligiendo ser afectuoso en lugar de egoísta y cruel. Esta filosofía, si se practicara por cada persona en el planeta, podría convertir lo que él llama un siglo pasado de “derramamiento de sangre y violencia” en un próximo siglo de paz.
“La violencia es moralmente equivocada y perversa”, dijo.
Muy expresivo –saludando con sus manos o golpeando sus puños contra sus palmas- el Dalai Lama también cuidó que su discurso no fuera manifiestamente político aunque tuvo muchas oportunidades para que así fuera.
Aparte de hacer un llamamiento para la prohibición de las armas nucleares –un comentario que provocó aplausos generalizados- él se refirió a su patria tibetana ocupada por China sólo cerca del final de una sesión de preguntas y respuestas en la cual él condenó a China.
China, dijo, no puede continuar manteniendo a su gente en la oscuridad. Ella necesita una prensa libre y debe permitir a la gente practicar sus propios sistemas de creencias.
“Una sociedad cerrada es casi como un suicidio” dijo.
Esta fue la última charla pública del Dalai Lama en Denver después de reunirse con nueve ganadores del Premio Nobel de la Paz este fin de semana para el PeaceJam, programa internacional de educación sin fines de lucro que tiene 10 años y que trajo a más de 3000 adolescentes de todo el mundo, para encontrarse con los laureados para trabajar en soluciones pacíficas a los conflictos que abundan.
El discurso del domingo en el Pepsi Center fue patrocinado por el Instituto Mente y Vida, co fundado por el Dalai Lama, Francisco Varela y el hombre de negocios Adam Engle en Boulder en 1987. El Instituto busca unificar la tecnología científica con las prácticas budistas para conseguir mejor salud y bienestar para la gente.
En el caso que la gente no estuviese segura sobre eso, un corto video narrado por el actor Richard Gere dio el lanzamiento, previo a que el Dalai Lama tomara el escenario.
La charla de 45 minutos del Dalai Lama comenzó cerca de 30 minutos tarde porque la seguridad era muy estrecha alrededor del Pepsi Center. Los Estados Unidos consideran al Dalai Lama Jefe de Estado de Tíbet, por lo tanto la seguridad del Servicio Secreto y del Departamento de Estado extendió largas líneas afuera del Centro.
Pero cuando este comenzó, la muchedumbre de más de 14.000 personas pareció hipnotizada.
Después de la actuación de la Asociación tibetana de bailarines de Colorado y de la interpretación de varias canciones de Nagang Kechog en su flauta, Engle presentó al Alcalde de Denver John Hickenlooper.
El Alcalde introdujo al Dalai Lama.
“Esto es realmente genial” dijo Hickenlooper antes del lanzamiento de la historia del Dalai Lama, que incluyó cómo él se convirtió en el XIV Dalai Lama al ser descubierto a la edad de 2 años por monjes budistas.
El Dalai Lama varias veces se refirió a la gente sobre cómo ser afectuoso y usar eso para conseguir la armonía con los demás. También urgió a la gente a ser egoísta en un modo sabio.
“Cuidando a más gente, tú obtienes los beneficios” dijo. “Cuidándote sólo a ti mismo, tú pierdes”.
Él también respondió varias preguntas seleccionadas de Internet, preguntas hechas por la gente sobre temas que variaban entre la paz mundial y cómo criar los niños.
Ante las dos preguntas –incluyendo la de criar un niño- él se rió cuando dijo “Yo no sé”.
El Dalai Lama le pidió a aquéllos en la multitud que no esperaran magia o su bendición, explicando que ambas no eran el por qué de que él estuviera allí. En cambio, él los urgió a que hicieran cambios positivos dentro de ellos mismos.
Al menos uno de aquéllos que escuchó su charla tomó su consejo de corazón.
Ryan Foo, 14, de Westminster, se sentó afuera del Pepsi Center y dijo que él creía que los objetivos del líder espiritual de un mundo más pacífico son alcanzables y que él quiere ir a trabajar por ellos enseguida.
Foo dijo que el éxito es posible, pero no probable en su vida, sin embargo.
“Yo estoy dispuesto a trabajar por esto así aquellos después de mí pueden tenerlo” dijo “Yo creo que es lo que el Dalai Lama está haciendo ahora”.-