A continuación una breve explicación sobre la Naturaleza de las Tres Joyas, Buda, Dharma y Sangha, y el sentido que tiene la toma de refugio en el Budismo. Esta breve enseñanza fue dada por Khachab Rinpoche, en el contexto del curso de Shedra y el análisis del texto de Jigme Lingpa, El Tesoro de las Cualidades Preciosas.
Ustedes ya saben que el primer paso para practicar el Budismo y para convertirse en un Buda es tomar refugio. La toma de refugio es el primer paso.
La razón de esto es que constituye la base de lo que nos permite aliviar el sufrimiento de esta vida y también para evitar los reinos inferiores en el futuro. El refugio es el mejor compañero que uno puede tener.
Si uno nace como tibetano, estará rodeado por el Dharma y le será natural tomar refugio, y no hará falta explicar la práctica, pero los occidentales requieren explicaciones detalladas de la lógica del refugio, de cuáles son las razones y el propósito de tomar refugio.
La primera razón es que necesitamos tener un soporte objetivo para nuestra confianza respecto de nuestro camino, de nuestra práctica y ese soporte son las 3 Joyas, Buda, Dharma y Sangha. De las 3 Joyas la principal es el Buda.
Si estudian la vida de Buda o de Padmasambhava, por ejemplo, ustedes reconocerán sus admirables cualidades, y todos los otros logros que ellos consiguieron, y surgirá en ustedes la inspiración, la motivación a tener estos mismos logros. Este tipo inspiración es algo vital para los seres humanos, ya que esto los ayuda a guiar sus vidas, pero lo más importante a entender es que Buda y Padmasambhava, y los 84 Mahasiddhas de la India, son diferentes de nosotros. ¿Pero en qué sentido lo son? ¿Qué los hace diferentes? Uno debe analizar esto. ¿Qué los hace diferentes?
La diferencia real entre ellos y nosotros es que practican y realizan el resultado, el fruto de la práctica, y se vuelven Budas. Cada uno de ellos se realizó y cada uno comprendió por sí mismo, mientras tanto nosotros no hemos tenido éxito en llevar la práctica a este nivel. Lo que han hecho es liberarse de los 3 venenos.
La pregunta que sigue es ¿Podemos hacerlo nosotros tambien?
Con esto se completa brevemente la discusión del Buda como refugio y ver cómo es que Buda puede inspirarnos como objeto de refugio, pero todavía no hemos entendido cómo es que la enseñanza es el refugio.
Podemos definir a un Buda como alguien que no tiene ninguna falta y tiene todas las cualidades. La razón de estos logros está en el dharma.
Hay dos tipos de dharma: (1) el de las escrituras o la tradición y (2) el de la realización personal. Gracias al primero podemos realizar el segundo.
Si practicamos de acuerdo la tradición, se puede llegar a tener realización, y esta realización tiene que ver con abandonar nuestras fallas y manifestar todas las cualidades, lo que es realmente el objetivo.
Para esto hay que comprender que este tipo de realización tiene que ver con nuestra propia mente, por tanto, el aspecto principal de la discusión acerca del dharma es apuntar a la naturaleza de la mente.
A este respecto podemos decir que aquello que debe ser aceptado y aquello que debe ser abandonado, los 3 venenos emocionales o las emociones negativas o las faltas que nublan la mente, tienen como característica que uno puede liberarse de ellas. No hay un factor intrínseco que nos impida hacerlo. Por un lado no hay obstáculos para liberarse de los aspectos negativos y por el otro lado las cualidades de la iluminacion están siempre en un estado potencial de manifestarse.
Ambas opciones estan ya presentes, por lo que tenemos la opción o el potencial de experimentar samsara o nirvana, entonces será la originación interdependiente la que determinará si experimentamos la no-iluminación o la iluminación.
Entonces, la distinción entre qué debe ser practicado y qué debe ser abandonado, proviene de la tradición y una vez que uno se ha conectado con esta tradición y ha hecho uso de ella, uno va a obtener el efecto de esta práctica, por lo que se hace evidente una relación de causa y efecto entre la tradición del dharma textual y el dharma de la realización.
El tercer objeto de Refugio es la sangha, la sangha es la comunidad, esto es cualquier persona que practique o estudie el dharma. En el sentido más alto, sangha son aquellos que merecen ser honrados o recibir ofrendas.
Los seres con realización son un campo de mérito, es decir, al relacionarnos con ellos acumulamos mérito, pero sangha no son sólo monjes y monjas, sino cualquiera que tenga un nivel de práctica y de realización. Por ello, es uno de los objetos de veneración y uno de los refugios. Cualquier persona que tenga un nivel de práctica y de realización es un campo de mérito para nosotros.
De entre los tres objetos de refugio, el dharma es lo más importante ya que es lo que causa al Buda y a la Sangha. Buda es quien ha realizado el dharma y Sangha es quien está realizando el dharma, por tanto el dharma es el aspecto central, que causa los otros dos objetos del Refugio.
Uno debe pensar bien para entender correctamente la palabra “Dharma”, ya que el dharma es un proceso que nos permite separar la mente de las emociones perturbadoras, y cuando la mente está libre de emociones negativas, esto es el dharma, el haber comprendido y haber realizado el dharma.
El dharma es entonces el proceso de eliminar las emociones y estados mentales negativos.
Es por eso que hablamos de tomar refugio o del poder protector del dharma y de las tres joyas en su conjunto, ya que nos protejen de los enemigos que son las emociones aflictivas y los estados cognitivos negativos.
Es muy importante entender esto. Si no lo entendemos, y nos quedamos pegados en ideas como la de Budas cósmicos o la filosofía, etc., perdemos de vista la significación verdadera tanto del dharma de los textos como del dharma de realización que es liberarse de las emociones negativas y sus consecuencias, y por tanto el dharma no puede protegernos ni nos sirve de refugio, seguimos igualmente desprotegidos y carentes de un refugio verdadero.
Si uno entiende esto surgirá la fe inamovible y se entenderá el sentido último del refugio. Si entendemos esto, entendemos que el dharma es entender cómo es posible liberar la mente de los kleshas y además manifestar totalmente las cualidades positivas. Esto es el punto central de cualquier análisis del refugio.
Más aún en nuestra práctica de meditación, o de contemplación, si uno unifica ésta, con el analisis, uno alcanzará la experiencia de las notables cualidades de la mente, y ya no tendremos ninguna duda de la realidad última de la mente.
Por ello tener seguridad y comprensión del refugio, nos permite tener verdadera confianza, y por tanto podemos practicar correctamente, de este modo es que el refugio es la base de la realización. Si tenemos dudas o no comprendemos cuáles son las bases del refugio, nuestra práctica carecerá de un verdadero fundamento, de un sentido de dirección verdadero, y entonces será muy difícil tener alguna realización.
Traducido del Tibetano por John Petit, PhD. y del Inglés por Mauricio Salinas M.(Ngakpa thondup) para beneficio de todos.