Por Lama Orgyen Choling Dorje (Nyigmapa)

¿Qué es el Budismo?

El Budismo no puede ser ubicado en una categoría. No hay etiqueta que le sirva. El Budismo no es una religión, al menos no en el sentido en que generalmente usamos esta palabra. En efecto, no presupone la creencia en la existencia de uno o varios dioses, y de modo más general, rechaza categóricamente la idea que haya que creer en algo sin analizarlo por medio del razonamiento.

El Budismo no es una filosofía tampoco, porque no está limitado a un enfoque intelectual o conceptual. Enseña en efecto, que para compreder realmente esto no es suficiente. Uno debe también experimenar y eventualmente alcanzar realización. Esta es la dimensión espiritual del Budismo

El Budismo tampoco es un fenómeno cultural, político o social.

La cultura, de la cual uno puede decir que el arte es la expresión superior de ella, está enrraizada  en lo mundano, mientras que el Budismo, va más allá de lo mundano.

Dentro de la cultura, el arte es un fin por sí mismo y en sí mismo, pero dentro del marco de referencia del Budismo, es sólo un medio. El arte es algo menor cuando se le compara a la Sabiduría. En otras palabras, el Budismo es atemporal y está más allá de lo mundano, mientras que la cultura o el arte están enraizados en un tiempo y una sociedad dadas.

El Budismo no es político, esto es, no conoce los límites de las fronteras ni de los grupos.  No se basa en la oposición entre las personas. No viene de “algún lado”. Trasciende continentes y grupos humanos. Nacionalidad, color, clase social y membrecía en un partido o en otro, etc., no constituyen un criterio pertinente bajo este punto de vista. El proceso es por el contrario, mostrar que de modo fundamental, toda las personas, y  mejor aún, todos los seres vivos, comparten la misma naturaleza fundamental, las mismas aspiraciones,  y los mismos temores.

Tampoco es un fenómeno social. El Budismo es la búsqueda de la perfección por parte de un individuo. El  Budista debe preocuparse de sí mismo, y se desenvuelve en la soledad de su propio camino espiritual. El mensaje del Budismo influencia, ciertamente, la actitud o conducta  de aquellos que lo estudian y lo practican, pero no tiene un enfoque social.  No pretende crear un grupo de presión o  establecer reglas acerca de cómo organizar la sociedad.

¿Es el  Budismo una ciencia?  Las ciencias, en cualquier caso,  por lo menos aquellas que describimos como puras, están vueltas hacia el mundo exterior, a los diversos fenómenos que percibimos. El Budismo es por el contrario, enfocado en el ¨interior¨;  que es lo mismo que decir que se ocupa de la mente. Esta es la razon por la cual a veces se dice que el budismo es ¨una ciencia de la mente¨, pero ésta, así como cualquier otra expresión, tiene sus límites.

Prefiero decir que el Budismo no puede ser clasificado, porque elude las categorías y las comparaciones.

Históricamente, el Budismo es la enseñanza del Buda Shakyamuni, quien vivió en la India, más de dos mil quinientos años atrás. Con el paso de los siglos, las enseñanzas fuerons transmitidas, traducidas en varios idiomas y enriquecidas por numerosos comentarios. De este modo, la literatura Budista es incomparablemente vasta.

Más profundamente aún, el Budismo es el pensamiento o la intención de los Budas, lo que se resume en dos grandes principios: Compasión y Sabiduría.  El Budismo es por consiguiente, una manera de pensar. Los Budistas son aquellos que aspiran a encontrar esta manera positiva de pensar y se entrenan en ella. Los Budas son aquellos que ya han logrado esto.

Uno puede decir que  el Budismo es esencialmente una reflexión acerca de la felicidad, y de las enseñanzas acerca de las causas de la felicidad.  Porque, después de haber visto cuánto nos engañamos a nosotros mismos, cuánto perdemos el camino debido a la forma en que vemos el mundo y a nosotros mismos, el Budismo nos despierta a una nueva visión.  Nos hace ver las cosas de otro modo y nos lleva progresivamente a la realización de la verdadera naturaleza de las cosas y de la mente.

Esta realización es precisamente la causa del cese de todo sufrimiento y todo miedo. Un budista, sobre todas las cosas, es una persona serena. Es alguien que no tiene miedos. Es una persona buena y abierta a los demás. Estas tres cualidades  de sabiduría, serenidad y bondad, están relacionadas entre sí, y una produce a  la otra.

El Budismo es por consiguiente, un viaje hacia la sabiduría, la serenidad y la bondad.

Este texto fue escrito originalmente en Francés por el Lama Orgyen Choling Dorje por la solicitud de  Dzogchen Ranyak Patrul Rinpoche Tenzin Nyima en Diciembre de  1999.

«Una vez que uno siente el deseo de practicar el Dharma, no debe dejar que la flojera o el perder el tiempo, nos influencien aunque sea por un momento. Uno debe trabajar de inmediato, impulsado por la noción de la impermanencia. A esto se le llama, tener  diligencia en la acción».

«Una persona con una inteligencia excepcional pero con poca diligencia, sólo será un estudiante inferior. Pero alguien no tan inteligente, pero con una diligencia extraordinaria, se convertirá en un estudiante superior. Sin diligencia, las otras cualidades son algo inútil». – Patrul Rinpoche «Las Palabras de Mi Maestro Perfecto»

Traducido del Ingles por Ngakpa Thondup para beneficio de todos. Que el mérito que se ha generado de este trabajo se multiplique y se transfiera completamente para que todos logremos prontamente el completo y pefecto despertar. Om VaGhi Svari Mum